Apellido patronímico, más frecuente como Gregorio que como “de Gregorio”, derivado del nombre de bautismo Gregorio, derivado a su vez del nombre personal latino Gregorius, adaptación del nombre griego ghregorios, de eghregorein, “estar atento, despierto”. El apellido se encuentra disperso por España, si bien con la forma “de Gregorio” se registra sobre todo en Madrid y en las prov. de Ciudad Real, Barcelona, Guadalajara y Soria, con asientos menores en las de Zaragoza, Valladolid, Zamora, Toledo, La Rioja, Huelva, Alicante, Vizcaya y Córdoba, entre otras.

Una muy antigua casa castellana de este apellido hubo en la villa de Belvís de la Jara Toledo), y de ella descendió Bernardo de Gregorio de Las Heras, bautizado en Belvís de la Jara en 1749, que pasó a América y se estableció en la ciudad de Buenos Aires (Argentina), retirándose como Capitán del Ejército en 1791. Otra importante casa del apellido (de) Gregorio hubo en Laguna de Cameros (La Rioja). Ante la Real Chancillería de Valladolid probaron su hidalguía, entre otros: Fco. Javier de Gregorio de la Peña, vecino de Pradillo (La Rioja), en 1583, y José Gregorio de Tejada, vecino de Laguna de Cameros, en 1781.

Armas.- El “Repertorio de Blasones de la Comunidad Hispánica” recoge, en primer lugar: Cuartelado: 1º y 4º, de azur, con una estrella de oro, y 2º y 3º, de gules, con una cabeza de rey, al natural.