Tuvo este linaje Palacio de Armería en el lugar de Guendulain (cuyo nombre sin duda tomó), del Ayuntamiento de Esteribar y partido judicial de Aoíz, en Navarra. Otra casa hubo en la villa de Lónguida, del mismo partido judicial. A dicha casa pertenecieron Francisco Javier de G. y Pettriz y su hijo Francisco de G. y Yanguas, y también Bernardo de G. y Maistterrena, que en unión de otros parientes suyos de apellido Pettriz, comparecieron en 1780 ante la Real Audiencia de Pamplona solicitando el reconocimiento de su nobleza como descendientes de las casas nobles de sus apellidos, lo que obtuvieron. Algunos de estos caballeros habían alcanzado ya declaración de nobleza en 1776, como descendientes de la casa de Yanguas, en Tauste (Zaragoza).