Antiguo apellido, bastante frecuente y repartido por España, procedente del sustantivo castellano melero, “persona que tiene por oficio producir y vender miel”.
Escriben los afamados genealogistas y heraldistas García Carraffa que tuvieron los Melero una antigua casa solar en Aguilar del Río Alhama, del p. j. de Cervera del Río Alhama (La Rioja), desde donde sus ramas pasaron, principalmente, a Castilla, Aragón, Murcia y Andalucía.
De la casa de Aguilar del Río Alhama fue José Melero y Díez de Ulzurrum, natural de Tarazona (Zaragoza) y Caballero de la Orden de Santiago, en la que ingresó en 1693. Otros Melero tuvieron casa solar en Alquézar, con la rama en la ciudad de Huesca.
De una casa sevillana del apellido descendió Miguel Melero Jiménez, documentado por los años de 1600, que fue escritor y médico; se le sabe autor de la obra "Examen Pacífico de la Alegación Apologética".
En la Real Chancillería de Granada probaron su nobleza, entre otros: Juan Melero, vecino de Pliego (Murcia), en 1557, y Pedro Melero Carrizo, vecino de San Lorenzo de la Parrilla (Cuenca), en 1692.
Armas.- El “Repertorio de Blasones de la Comunidad Hispánica” recoge, en primer lugar, para Melero: De azur, con una mano de carnación, moviente del flanco siniestro, en cuya palma tiene una colmena o panal de miel y varias abejas, de sable, volando alrededor.
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