Apellido de origen toponímico, poco frecuente y disperso por España, si bien se registra sobre todo en Madrid, siendo notable su presencia en Jaén, Málaga, Córdoba, Barcelona, Zamora y Sevilla, y menor en Asturias, León, Valladolid, Cáceres, Cádiz, Valencia, Cuenca, Ávila, Vizcaya, Granada, etc.
Procede del topónimo Villarejo, nombre de poblaciones en Ávila, Cuenca, La Rioja, Salamanca, Segovia, Zamora, Madrid, Toledo, etc., cuyo origen está en un diminutivo del sustantivo castellano –villar- “pueblo pequeño, aldea”.
Hubo, por tanto, distintas casas solares de este apellido, no emparentadas entre sí. Ante la Real Chancillería de Valladolid probaron su nobleza: Juan y Martín Rebollar Villarejo, vecinos de Herramelluri (La Rioja), en 1572, y Santiago Rebollar y Villarejo, vecino de Tirgo (La Rioja), en 1792.
Igual probanza de nobleza hicieron ante la Real Chancillería de Granada: Fco. Benito Villarejo, Juan de Villarejo Alvarado, Pablo Ramón Villarejo Jofré y Juan Villarejo Montano, vecinos de Puebla de Alcocer (Badajoz), en 1816, 1702, 1816 y 1669; Juan, Pedro, Álvaro y Alonso Villarejo, vecinos de Esparragosa de Lares (Badajoz), en 1671; Miguel Villarejo y Baltasar Villarejo Ramírez de Arellano, vecinos de Villanueva de Alcaudete (Toledo), en 1782 y 1773; Baltasar Hermenegildo Villarejo Ramírez y Juan y Leandro Villarejo Ramírez de Arellano, vecinos de Consuegra (Toledo), en 1800 y 1833, etc.
Armas.- Unos Villarejo: En gules, una faja, de oro, acompañada de dos panelas, de plata.
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