Apellido aragonés, con casa solar en Albalate de Cinca (Huesca), documentada en la Fogueración aragonesa de 1495.

Pasaron a Madrid, Lima (Perú) y México.

El topónimo Candel, según señala Moll, es el nombre de dos lugares uno en el Rosselló y otro en l'Empordá que quizás tengan relación con el apellido.

Armas:
En campo de sinople, tres lobos, de oro, puestos en palo, pasantes y cebados de plata.

Apellido que se registra, sobre todo, en Murcia, Albacete, Alicante y Valencia, procedente, en parte, y en opinión de algunos tratadistas, de una variante del catalán Candell, nombre de dos localidades catalanas, una en la provincia de Girona, agregada al municipio de Rupià, y otra en el Rosellón (sur de Francia), derivado del latín –cannetum-, “cañaveral”. También en Francia ha habido, desde tiempos antiguos, familias Candell y Candel. No obstante, la presencia del apellido Candel en toda España sugiere que tuvo orígenes distintos. De hecho, el filólogo Gutierre Tibón señala que la forma Candel, derivada del latín –candela-, “vela de luz”, sería de origen castellano y, en otros casos, de origen francés. Familias Candel se hallaron entre las que repoblaron el antiguo Reino de Valencia, levantando casas en Penàguila (1421), Xàtiva (1421), Llíria (1427), etc. En Catalunya, según el “fogatge” del año 1497, un tal “en Candel”, de profesión “boter”, vivía en Barcelona; Miquel Candel vivía en Servià (Girona); Jaume Candell vivía en Rupià (Girona), y Antoni Candel vivía en Elna (Perpinyà). Joan Candell, Burgués y Síndico de Vilafranca de Conflent, asistió a las Cortes catalanas de 1449, y Pablo Candell, Burgués y Síndico de Besalú, lo hizo a las de 1528. Ante la Real Chancillería de Granada probó su hidalguía Tomás Candel Moreno, vecino de Ojós (Murcia), en 1805.

Armas.- El “Repertorio e Blasones de la Comunidad Hispánica” recoge para Candell (Candel): En azur, un halcón, de oro.