Antiguo apellido de origen toponímico, poco frecuente y disperso por España, si bien se registra sobre todo en la Comunidad de Madrid y en las provincias de Cáceres y Salamanca, siendo notable su presencia en Zamora, Barcelona, Valladolid y Vizcaya, y menor en Valencia, Cádiz, Sevilla, Badajoz, Asturias, etc. Pasó a Hispanoamérica. Procede del topónimo Almaraz, nombre de poblaciones en las provincias de Cáceres, Zamora y Valladolid, cuyo étimo, según el arabista Miguel Asín, sería el árabe al-maraz, “el labrantío”. Uno de los más antiguos portadores de este apellido fue Día Gómez de Almaraz, quien hacia el año 1250 obtuvo en señorío la villa de Almaraz (Cáceres), cuyo nombre tomó y continuaron como apellido sus descendientes. De esta casa fue Diego Gómez de Almaraz, que se distinguió en la toma a los moros, en 1410, de la ciudad de Antequera (Málaga).
De Plasencia (Cáceres), nacido en 1460, fue el valeroso Capitán llamado Alonso de Almaraz, apodado “El Forzudo”. Probaron su nobleza ante la Real Chancillería de Valladolid, entre otros: Jerónimo de Almaraz, vecino de Zamora, en 1527; Francisco de Almaraz, vecino de Belvís de Monroy (Cáceres), en 1565, y Baltasar, Juan y Pedro de Almaraz, vecinos de Bañuelos, en 1594. Gonzalo de Almaraz, natural de Plasencia, ingresó, en 1565, en la Militar Orden de San Juan de Jerusalén. Armas.- Fueron las primitivas: En campo de oro, una banda de azur, engolada en cabezas de dragones, de sinople. Bordura de gules, con ocho aspas de oro.
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